ENTREVISTA: Salvador Robles Miras

 

-¿Qué novedades como escritor nos puedes contar desde que te hice la primera entrevista que publiqué el pasado 25 de enero del 2021?

Bastantes. He publicado una nueva novela, “1951” y he entregado tres libros más a la editorial: uno de ensayos y aforismos, a modo de prontuario para afrontar la vida; y dos novelas que completan la trilogía sobre ETA. Ahora, tengo bastante avanzado un libro “apto para todos los públicos” y que tiene a los niños como protagonistas.

-Te tengo que dar las gracias por aquella primera entrevista,ya que de alguna manera tanto usted como Julián Redondo Pérez y Carmela Trujillo son los padrinos del blog, ya que era un blog totalmente en pañales, sin ninguna entrevista publicada por aquel entonces y siendo usted la tercera entrevista que iba a tener un proyecto aún pendiente de creación, ¿Porque razón se aventuró a esa entrevista cuando el blog aún no existía como tal y que siente que un año y medio después esta entrevista sea la quincuagésima séptima entrevista del blog escrita sin tener en cuenta las entrevista en formato directo?

Porque me transmitiste amor por la literatura. Una razón de peso para mí.

-En esta nueva entrevista quiero centrarme en tu nueva novela “1951”, ¿de qué se trata y cuáles fueron las influencias de su creación?

Las influencias todas, familiares y personales, ya que nací en la dictadura franquista y padecí el régimen durante mi infancia y adolescencia. La literatura te permite crear mundos paralelos al real, mundos en el que estableces un orden que no existe en la realidad, mundos en los que incluso puedes ajustar las cuentas a ciertos personajes de tu vida. Además, me interesaba homenajear a los que sufrieron en sus propias carnes el franquismo, las personas que, de alguna manera, hicieron posible que en España se estableciera una democracia.

-En las generaciones más jóvenes(incluso mucha gente de la mía) hay un desconocimiento muy generalizado de los sucesos que ocurrieron durante la España franquista, ¿hasta que punto has querido hacer tu libro didáctico para esas generaciones?, ¿Crees que la educación actual debería de desarrollar y centralizarse más en la dictadura franquista que lo que hace actualmente? ¿Porque crees que la Educación ha decidido en parte hacer esa “ley de olvido” y de cierto modo hacer una especie de borrón y cuenta nueva? ¿Que palabras o consejo le dirías a ese adolescente con 15/16 años que hoy en día se autodenomina franquista? Como persona que vivió el franquismo, ¿Como se siente con ese desconocimiento generalizado y incluso apoyo al franquismo de alguna parte de la juventud y la “ley del silencio”que ha hecho el gobierno en educación?

En España se procuró no remover el pasado para no agitar los viejos fantasmas. En la transición, con la amenaza militar por una parte y la terrorista por otra, se optó por sortear el presente y mirar el futuro, obviando el pasado. Craso error. El pasado siempre nos persigue, entre otras, cosas, porque estamos hechos de pasado. Es triste que los jóvenes de hoy en día conozcan muy someramente los cuarenta años de dictadura, lo cual les priva del conocimiento de las raíces de sus progenitores, también se les arrebata la posibilidad de, por contraste, valorar el presente. La democracia no es un regalo caído del cielo, se gesta día a día, con esfuerzo, tolerancia y respeto por el otro. Muchos españoles fueron masacrados por el franquismo, y solo por pensar diferente. Es un deber moral recordarlos.

-La historia de su novela podría ser perfectamente un hecho real que le podría haber ocurrido algunas de las innumerables victimas y a sus respectivas familias en los multitudes de sucesos ocurridos en los cuarenta años de la dictadura franquista, ¿se basó en alguno en particular aunque fuera de manera leve para construir su historia?

La imaginación siempre se nutre de la realidad. Me inspiré en retazos de vidas que conocí directa e indirectamente. Por ejemplo, en el fusilamiento de la madre del protagonista, me inspiré en el caso real de un maestro de escuela mío, que estuvo condenado a muerte y también en la película “La voz dormida”. Uno se alimenta su imaginación con todos sus vivencias, y entre éstas incluyo también las películas y los libros.

-En Pasillo de Biblioteca somos amantes de la literatura y el cine. Como persona que vivió la dictadura franquista, ¿que libro no pudiste leer y que película no pudiste ver por la censura franquista y que sensación tuviste cuando por fín tus ojos pasaron por ellos?

No pude leer entonces los libros de Albert Camus, “El hombre rebelde”, “La peste” y “El extranjero”, entre otros; también “Lolita”, de Vladimir Nabokov… y tantos otros. Voy a citar una sola película, por su simbología, aunque podría mencionar cientos, me refiero, claro, a “El gran dictador”, de Charles Chaplin.

-Estamos hablando de desconocimiento de décadas pasadas pero lo preocupante es que al día de hoy hay un “cerrar los ojos” en cuestiones actuales. Has denunciado públicamente un trágico suceso que la concierne a nuestro mayores durante los meses de marzo y abril del 2020 y un decreto firmado por el gobierno. Salvador, desde mi humilde blog te dejo un espacio para poder seguir difundiendo y denunciando este suceso actual que mucha población desconoce.

Fue una orden dictada por algún gobierno autónomo, como el de Madrid, en la cual, durante los meses de marzo y abril de 2020, se prohibió derivar a hospitales a los ancianos que presentaran síntomas compatibles con el Covid. Muchos ancianos, usuarios de residencias, murieron rabiando de dolor encerrados en habitaciones. Fue una ignominia. Y pensar que todavía hoy a ningún político se le han exigido responsabilidades por tamaña vileza. 

-Enlazando con la denuncia anterior..Con el desconocimiento y el pasotismo de mucha parte de la población y sobre todo joven crees que seria posible que ganase las elecciones españolas algún partido totalitario disfrazado con el manto de la democracia.

Claro que es posible. Ha ocurrido en algún país de la Unión Europea, aquí también podría suceder, y más con la indiferencia que muestran hacia la política un sector importante de la población. La libertad tarda muchísimo en conquistarse y se puede perder en muy poco tiempo.

-Al contar una realidad tan polémica y fina como la España Franquista por ambos bandos, ¿alguna editorial rechazo la novela por motivos políticos o por posibles futuras represalias?

No. La editorial a la que le remití el manuscrito mostró interés por publicarla… y la publicó. 

-Y usted a nivel personal, ¿ha tenido algún problema o encontronazo por escribir esta historia?

Alguna palabra subida de tono en redes sociales de un par de personas. Nada más.

-”1951” esta editada por la editorial “Pluma de sueños” ¿como fueron los primeros acercamientos a la editorial y todo el proceso en conjunto, tanto personal como laboral, hasta el día de hoy?

Mi acercamiento a la editorial fue a través de Virginia Bonilla, una mujer a la que admiro por su increíble capacidad de trabajo y diligencia. Entregué el manuscrito, publicaron la novela cuando lo consideraron oportuno (febrero de 2022), y conocí posteriormente al editor Pedro María Morales, todo un personaje en la mejor acepción del término, y así hasta el día de hoy.

-¿Tuviste que dejar alguna historia o persona atrás que en un principio tenias pensado incluir en la trama?

Sí, en la primera versión incluí un par de capítulos más sobre la Guerra Civil, que, luego, suprimí para conferir más agilidad al libro.

-Por contrario, ¿cuál es ese personaje secundario y historia que no hubieses sacrificado de ninguna de las maneras?

El fusilamiento de Adelaida. La madre de Ginés y Maruja. Considero que ese hecho explica, que no justifica, el comportamiento posterior de Ginés.

-”1951” tiene un ritmo y una historia perfecta para ser llevada al cine o en su defecto alguna miniserie, ¿te plantarías la posibilidad de llevarla a la pequeña o gran pantalla si alguna productora estuviera interesada en tu obra. Si es así qué elenco (dando igual nacional o internacional) te gustaría ver en los personajes principales.

Soy muy aficionado al cine, y, sí, estoy convencido de que ‘1951’ podría inspirar una película o una serie. Como actores, elegiría a: Elena Rivera o Megan Montaner, en el papel de Beatriz; Álvaro Cervantes, como Ginés Flores Ríos; Patricia López Arnáiz, encarnando a Maruja; y Ernesto Alterio, como el capitán Aníbal Landa. De director, Benito Zambrano.

-¿Como ves el mundo literario en España, tanto a nivel lector como a nivel autor?

Hay que fomentar la lectura (de libros de literatura) entre los jóvenes, la garantía de que haya buenos lectores en el futuro. El ejemplo lector de los mayores sería el mejor medio. Para ser escritor de largo recorrido en España, hay que tener más moral que el Alcoyano y amar profundamente la escritura. Escribir requiere muchas horas y sacrificios, y esta inversión de vida, económicamente en la mayoría de los casos no resulta rentable. Las satisfacciones vienen por el otro lado, el que realmente merece la pena: el hecho de que un buen número de lectores valoren tu obra. Por lo demás, aconsejaría a los jóvenes autores que no se lancen a publicar sin adquirir antes el oficio que les permita entregar al mundo obras de los que luego no se arrepientan. Lo que se escribe y publica queda para siempre.

-La portada es muy sencilla pero a la vez con unos elementos muy definidos y orientativo de la trama, ¿fue creación tuya?

No. Es de un excelente artista, el diseñador César Pellecín.

-¿Qué ha significado para tí la literatura a lo largo de tu vida?

Todo. Fue, es y será mi gran vocación, la que me ha permitido profundizar en el conocimiento de la naturaleza humana. Los libros son el medio con el que el autor entrega al mundo su legado, prácticamente todo lo que ha aprendido en su vida.

-¿Cuáles son esos autores que admiras y ese libro que siempre estará en tu corazón?

Me gustan muchísimo los autores rusos del siglo XIX, principalmente, Dostoievski, a pesar de que casi todos sus personajes son extremos, y Tolstoi. También Primo Levi, Miguel Torga y Charles Dickens. Entre los escritores españoles actuales, mi preferido es Luis Landero.

-¿Alguna anécdota con tu libro de fondo?

Sí, que han sido varios los lectores, algunos amigos míos, que me

han vaticinado que con este libro llegaré a miles de lectores. Y

algunos de estos vaticinadores tienen fama de pitonisos. 

-¿Un consejo para que la gente que no es amiga de las letras empiecen a 

darle una oportunidad a la lectura?

Que la única manera que tienen de conocer a los difuntos, también

a las personas con las que jamás coincidirán, es leer sus obras,

suponiendo que hayan dejado un legado escrito. Además, si leen,

llenarán de palabras su pensamiento. Y el pensamiento trabaja con

palabras. Si no hay palabras suficientes dentro de él, faena poco y

mal.

-Esta pregunta que es unas de las fijas en mis entrevistas no la hacia aún cuando te entrevisté por primera vez para el blog, así que te la hago ahora.

Me consta porque me ha pasado personalmente, eres un escritor que siempre tiene buenas palabras para los reseñadores y nos halaga y comprende que somos una parte importante de difusión de la novela por redes sociales. Por la parte contraria hay autores que nos tachan de niñatos que no tenemos ni puta idea y casi nos escupen a la cara de forma metafórica. O también como ha pasado en mi caso, de un principio no tratarme bien del todo pero cuando se han enterado que no tengo los 20 años y estoy más cerca de los 40 me han empezado a tratar con respeto, ¿qué opina de esos escritores que dignifican tanto el trabajo(la mayoría de forma gratuita) de las cuentas de Instagram/blog reseñadoras.

Un escritor solo puede llegar a los lectores si su obra es visible. Y

los reseñadores, sobre todo los que aman la literatura como tú,

hacen posible esta visibilidad, o sea, que son en parte los artífices

de que mucha gente nos lea. De todo corazón, gracias por vuestra

labor.

-Como últimas preguntas, “1951 ”está recibiendo multitud de halagos de los lectores, ¿cómo se siente con tales halagos?, ¿Unas palabras para todos los que hemos disfrutado de esta novela? ¿Y unas palabras para acabar de convencer a esas personas que están en duda? ¿y por último unas líneas generales para todos los lectores?

‘1951’ es una novela que bebe de varias fuentes o géneros, y está

escrita con el corazón en la cabeza. Cualquiera puede complicar 

un texto normal, lo difícil es hacer sencillo lo complicado. ‘1951’,

gracias a un lenguaje sencillo, se lee con facilidad, lo cual no es 

óbice para que el lector encuentre muchos pasajes que le invitan a 

la reflexión. Tenía mucha confianza en este libro, pero 

sinceramente la entusiasta reacción de los lectores ha desbordado

mis expectativas. En la novela está una parte importante de mi 

persona, por lo que, quien la lea se apropiará de un buen pedazo

de Salvador Robles Miras. Más vida para su vida.