Hace
algunos años en un taller literario al que asistí, nos dijeron una
frase que me marcó: Un buen escritor consigue que algo ordinario como la
realidad sea tan interesante que sea capaz de encadenarte hasta la
última hoja, lo que más comúnmente se conoce como la belleza de la
simpleza.
Esas palabras resume perfectamente lo que Carmela Trujillo ha conseguido con “Guardando las apariencias”.
No voy a hablar apenas sobre la historia que esconde este maravilloso libro, ya que flaco favor estaría haciendo para los futuros lector@s de la obra, ya que es una historia que bajo mi opinión se disfruta totalmente virgen sin saber un ápice, incluso creo que la contraportada da demasiada información y de cierta manera estropean un poco la experiencia
Simplemente diré que nos cuenta de manera muy original y dinámica la vida de una mujer llamada Cándida Pizarro, desde su nacimiento en el año 1943 hasta la fecha de su muerte. Estamos ante una historia ficticia pero podría ser totalmente real, si tuviera alguna nota o prólogo diciendo que esta basado en un historia real, me lo hubiera creído sin dudar.
La narrativa de Carmela en este trabajo(no me he leído nada más de esta autora pero a partir de hoy esta totalmente pendiente leer más obras de ella) es sencilla y directa(incluso en algunos momentos puntuales usa vulgarismo totalmente justificados por la trama), con un vocabulario ordinario dejando de lado descripciones pomposas y prepotentes. El sello de esta novela es sencillez.
Es un libro ágil de leer(me lo leí en tres ratos de corta duración),de esos libros perfectos para leerlo en un transporte público o sentado en la tranquilidad de un banco de un parque de buena mañana, pero eso no significa que sea malo, lo contrario, dice el dicho: Los buenos perfumes vienen en frascos pequeños.
Esas palabras resume perfectamente lo que Carmela Trujillo ha conseguido con “Guardando las apariencias”.
No voy a hablar apenas sobre la historia que esconde este maravilloso libro, ya que flaco favor estaría haciendo para los futuros lector@s de la obra, ya que es una historia que bajo mi opinión se disfruta totalmente virgen sin saber un ápice, incluso creo que la contraportada da demasiada información y de cierta manera estropean un poco la experiencia
Simplemente diré que nos cuenta de manera muy original y dinámica la vida de una mujer llamada Cándida Pizarro, desde su nacimiento en el año 1943 hasta la fecha de su muerte. Estamos ante una historia ficticia pero podría ser totalmente real, si tuviera alguna nota o prólogo diciendo que esta basado en un historia real, me lo hubiera creído sin dudar.
La narrativa de Carmela en este trabajo(no me he leído nada más de esta autora pero a partir de hoy esta totalmente pendiente leer más obras de ella) es sencilla y directa(incluso en algunos momentos puntuales usa vulgarismo totalmente justificados por la trama), con un vocabulario ordinario dejando de lado descripciones pomposas y prepotentes. El sello de esta novela es sencillez.
Es un libro ágil de leer(me lo leí en tres ratos de corta duración),de esos libros perfectos para leerlo en un transporte público o sentado en la tranquilidad de un banco de un parque de buena mañana, pero eso no significa que sea malo, lo contrario, dice el dicho: Los buenos perfumes vienen en frascos pequeños.
Comentarios
Publicar un comentario